El botijo es un chisme que lleva con nosotros toda
la vida, y jamas dejará de sorprenderme.
Para no dispersarme me voy a
centrar en su principal cualidad, hace el agua de su interior fresca,
reduciendo la temperatura respecto el exterior hasta en 15º.
Antes de continuar quiero
advertir que la eficacia del botijo y por
extensión de este sistema de aire acondicionado depende de
la humedad relativa del aire, por encima del 75% simplemente no
funciona, hasta un 70% no lo hace del todo bien, y por debajo del 50%
es el paraíso perdido de los botijos.
Los botijos están
hechos de un material poroso (barro cocido), que deja escapar una
pequeña cantidad de agua por toda su superficie, como si
sudara, y esto lejos de ser un inconveniente es una ventaja, al
evaporarse este agua sudada hace descender la temperatura de
la pared del botijo y del agua del interior, este principio se le
denomina popularmente "efecto botijo".